Nearshoring en México: Impulso a la Productividad y Recaudación según la OCDE
El fenómeno del nearshoring ha ganado terreno en la economía mexicana, ofreciendo no solo oportunidades de crecimiento, sino también ventajas adicionales en términos de productividad y recaudación fiscal, según un reciente informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El secretario general de la OCDE, Mathias Cormann, destacó durante su visita a México la importancia de este proceso de reubicación de manufactureras, subrayando que presenta una oportunidad única para aumentar la productividad y promover el desarrollo económico en todo el país. Sin embargo, también advirtió sobre la necesidad de implementar estrategias internas que faciliten la integración de las pequeñas y medianas empresas (pymes) mexicanas en las cadenas de valor globales.
Una de las claves para aprovechar al máximo el potencial del nearshoring es impulsar la digitalización, fortalecer los programas educativos y de entrenamiento, desarrollar fuentes de energía renovable y mejorar el entorno empresarial en México. Cormann enfatizó que estas iniciativas requerirán un mayor esfuerzo recaudatorio por parte del gobierno, lo que a su vez fortalecerá la capacidad de inversión del sector público.
El informe de la OCDE proyecta una moderación en el crecimiento económico mexicano en los próximos años, con una tasa esperada de alrededor del 2.5% para el año en curso y un descenso a alrededor del 2% para el 2025. A pesar de este panorama, se destaca la resiliencia de la economía mexicana frente a los desafíos globales, así como los primeros indicios del impacto positivo del nearshoring, como el aumento en el intercambio comercial con Estados Unidos.
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El sector privado, especialmente en las regiones del sur y sureste del país, se espera que se beneficie significativamente de la llegada de inversiones relacionadas con el nearshoring. No obstante, el informe advierte sobre la incertidumbre asociada con posibles riesgos globales, como la aversión al riesgo, los costos de financiamiento y la volatilidad de los mercados cambiarios, que podrían afectar el desempeño económico de México en el futuro.
En este contexto, se subraya la importancia de fortalecer la capacidad recaudatoria del país. A pesar de un manejo prudente de las finanzas públicas, México sigue siendo uno de los países con menores ingresos tributarios dentro de la OCDE y América Latina. Para abordar esta brecha, se proponen medidas como la actualización y modernización del impuesto predial, así como la ampliación de la base gravable del sistema tributario. Estas acciones no solo fortalecerían las finanzas públicas, sino que también contribuirían a un sistema tributario más equitativo y eficiente.
En conclusión, el nearshoring representa una oportunidad estratégica para México, no solo para impulsar la productividad y el crecimiento económico, sino también para fortalecer la capacidad recaudatoria del gobierno. Sin embargo, para aprovechar al máximo estos beneficios, se requerirá un esfuerzo conjunto del sector público y privado, así como la implementación de políticas sólidas que fomenten la inversión, la innovación y el desarrollo empresarial en todo el país.